Debo de estar en cierto modo atascada o tal vez sencillamente....aun reflexiva;
igual es que me estoy replanteando las casualidades de la vida.
A todos nos ha pasado alguna vez que caprichosamente se han torcido unos planes previstos y calculados y luego ha pasado algo bueno que jamás hubieras pensado, y que te hubieras perdido sino te hubieras quedado; a todos nos ha pasado alguna vez, encontrar a alguien que hablando resulta ser una persona que no esperabas y de la que sabías su existencia por otros; a todos nos ha pasado, tener unas expectativas en una cosa y acabar haciendo otra, porque en el camino nos han surgido oportunidades que han hecho que nuestros caminos no vayan solo por donde la mente tenía calculado que iríamos, sino por donde el corazón y la mente te mandan ir porque tu motivación ha dado un brinco.
Llevo un mes con demasiadas casualidades.
Tantas, que a pesar de que sé que el que lea ahora mismo estas líneas pensará que NO ya está en la luna de Valencia...., me han hecho hasta tener la sensación que algo o alguien está dirigiendo mi vida desde algún sitio etéreo..., como si fuera la protagonista de una obra de títeres y marionetas en un escenario real como la vida misma con un guión escrito por alguien y que sigo a la perfección; y es que últimamente...parece que noto los hilos que me sujetan un poco tirantes...
Hace nueve meses que voy a una academia en la que me estoy preparando para un futuro examen, y en ese afán socializador que la curiosidad a veces me hace despertar.... en un lugar en el que acababa de llegar y era la única que no conocía a nadie, siendo que los demás sí se conocían entre ellos, empleé la tapadera de la necesidad de organizar mejor la dinámica de la clase para integrarme en el lugar...y me puse manos a la obra, la estructuré tan bien, uniendo a todos entorno a nuestra finalidad común, que creía conocer a mis compañeros tanto o más de lo que el límite de las circunstancias y de la situación marcaban.
Mi sorpresa fue una tarde que Hermes fue a buscarme a la salida de una de mis clases; y me sorprendí viendo como éste y una compañera mía se saludaban.
Se conocían. Hacía casi 20 años que no se habían vuelto a ver.
Inmediatamente, me alegré, pensé ¡¡que bien!!! ¡¡se conocen!! puesto que ella me cae muy bien, y por un minuto mi imaginación dio dos pasos por delante y me veía echando cañas los tres y entablando relación; por otro lado, como así está empezando a ser.
La cuestión es que esa chica fue la primera novia de un amigo mío que falleció hará dos años este julio y con el que me llevaba de maravilla....
Ella había estado diez años de relación con él (fue su primer novio).
En el momento que falleció, no mantenía contacto con él (por eso yo no la conocía); para ella, que se enteró del suceso por una llamada telefónica el día que S murió, dicho suceso inesperado le supuso un dolor y una quemazón, que lleva interna y aposentada desde entonces, y que durante un tiempo le hizo sentirse muy mal.... se reprochaba no haber mantenido el contacto con él en todos estos últimos años...siendo que le había marcado mucho el tiempo que compartieron juntos.
Llevaba ella mucho tiempo pensando con quien poder hablar de todo esto...y no encontraba con quien...(con su pareja actual no quería compartir esa parte del pasado-presente, no la entendería como ella lo siente...o como otra persona que hubiera conocido a S bien).
Cuando yo le dije que era amiga de S y que compartí días de pena y gloria en sus últimos años de vida....se nokeo.... No podía entender que me hubiera tenido al lado en una mesa nueve meses y ser una de las personas que había pasado por la vida de su ex-pareja...; su petición interior y su necesidad de sacar fuera lo que le inquietaba se cumplía....
Hablamos....se emocionó...le conté como murió y como había pasado los últimos años de su vida.... y encontramos otra casualidad....ella ahora lleva diez años con su pareja actual, que en su día le presentó S y yo llevó unos años de relación interrumpida con otro amigo de S.
Otro capricho del destino....el día que murió S, ella llevaba unos días viviendo temporalmente en casa de sus padres, por circunstancias que no vienen al caso y desconozco, cuando llevaba ya muchos años viviendo con su pareja fuera de La Ciudad del Viento capital. Esa mañana, le había dado por recorrer su antiguo barrio, donde había crecido y donde había pasado sus años de infancia, adolescencia y primera juventud junto con S, Hermes y muchos amigos más....
Recorrió calles rememorando momentos, puntos clave donde encajar imagenes que en esos momentos en flash back y ráfaga, pasaban por su mente animando sus recuerdos... y cuando acababa de pasar por la esquina donde S y ella siempre se despedían antes de irse cada uno a su casa... le llamaron por teléfono.....S había muerto.
Ella no paro de llorar....
Yo en otro lado de la ciudad, recibía la noticia esa misma mañana a través del Exprimidor de Limones...y tampoco podía parar de llorar....
Por otro lado hace una semana recibí a través del Instituto Nacional de Empleo una oferta de trabajo esculpida con esmero.
¿Una broma pesada? ¿un guiño de la fortuna o del infortunio? todavía no lo se...
Una oportunidad única que encaja a la perfección con una de las cosas que una siempre había pensado ser cuando estudiaba los años de carrera dejándose las pestañas encima de los libros... unas condiciones inmejorables y sin examen previo.... un imposible-posible, en un vago porcentaje.
Candidaturas miles y días para presentarlas contados con los dedos de una mano; cartas enviadas desde el inem a sólo unos cien de unos miles de millones de personas con la titulación exigida...entre ellos yo.
¿Casualidades de la vida? ¿Capricho del destino? en cualquier caso....yo tendría que haber estado en el sur de España cuando recibí esa carta; si me hubiera marchado... no hubiera podido presentar mi candidatura. Evidentemente....lo más probable es que una de las tres plazas que se ofertan no lleve mi nombre, pero si no hubiera estado, tampoco lo habría podido intentar y hubiera estado toda la vida dándome de cabezazos contra la pared.
Eso si.....si la consigo, será el primer día en el que alto y claro afirme, que desde ese día y poniendo a todos por testigos.... creo en el destino.